LA SOLEDAD (Jaime Rosales)

Que difícil me resulta defender las bondades, que son muchas en mi opinión, del cine español con largometrajes como La Soledad. He tardado muchísimo en verla, no quería, no me llamó la atención en su estreno ni después de lloverle premios y críticas increíbles, pero “había” que verla porque todo el mundo me la recomendaba. Pues bien, ni frío ni calor, me ha dejado tal cual, este realismo auténtico y transparente que tanto me suele emocionar (léase 4 meses por ejemplo), en este caso no lo hizo. Y los intérpretes podrán estar creíbles, que lo están, sus vicisitudes podrán ser como la vida misma, que lo son, pero no me pude librar de esa sensación de que no pasa nada, aunque pase, que te dan las películas aburridas. Sí, me aburrí, ¿qué pasa? Y aunque los puristas se mesen los cabellos no me avergüenza reconocerlo.

Sólo una cosa me llamó la atención: Esa forma de dividirnos la pantalla es bastante novedosa por lo que nos muestra en cada lado.
Impresiones del director sobre la polivisión: “La creación cinematográfica pasa por encontrar nuevas formas de percepción. Encontrar maneras nuevas de mostrar imágenes o enlaces entre imágenes. Aunque se corra el riesgo de fracasar, hay que intentar ir más allá. Ahí es donde entra la polivisión. La polivisión ha consistido en dividir la pantalla (formato cinemascope) en dos mitades iguales. Cada mitad corresponde a un punto de vista diferente sobre una misma escena. A veces se trata de dos ángulos sobre un mismo espacio (por ejemplo la cocina de una casa vista desde dos posiciones distintas). Otras, una visión simultánea sobre dos fragmentos de un espacio escénico más amplio (por ejemplo, el comedor y el salón de un apartamento sobre el que los personajes vienen y van). La idea detrás de la polivisión ha sido crear un código homogéneo a partir de un conjunto de reglas cuya función es aportar un sistema de percepción distinto al del formato natural. El reto y la dificultad han consistido en lograr un cierto distanciamiento y ruptura respecto a la lectura natural sin que dicha ruptura constituya un freno al tránsito de emociones. Alrededor del 30% del metraje total está rodado en polivisión”.